Chile y Argentina; solo con billete de ida y vuelta (Parte I)
Desde hace muchos años hemos tenido en la cabeza este viaje, pero por unas u otras razones nunca llegó a materializarse. Ahora sí, ha llegado el momento. Corre el año 2012, concretamente el 8 de noviembre. Podía ser un jueves cualquiera, pero no lo es porque vamos camino a Chile y Argentina. Durante 24 días disfrutaremos de un gran viaje.
Después de 13 horas de vuelo llegamos a Santiago de Chile. Sin más que un billete de avión de ida y vuelta porque queremos dejarnos llevar por lo que nos depare el destino. Pararnos aquí y allá en función de lo que nos vaya transmitiendo cada rincón que vamos recorriendo.
En la cola de inmigración lo decidimos. Si conseguimos un hotel en San Pedro de Atacama, nos vamos para allá. Hemos visto que hay un vuelo que sale dentro de cuatro horas, así que deberíamos tener tiempo suficiente. Escrutamos nuestra guía de viajes, indagamos aquí y allá, y sí, lo tenemos, hotel La Aldea. La verdad es que pensándolo fríamente ¿quién en su sano juicio después de 13 horas de avión, vuelve a cogerse otro vuelo? Sí, esos somos nosotros, supongo que la clave está en eso de lo del “sano juicio”. Jejejeje!!!! Y bueno, al fin y al cabo son solo dos horas más en el aire.
El hotelito es perfecto: un oasis dentro de un oasis (así es como lo describen ellos). Ducha reparadora y a inspeccionar el pueblo. Abundan las miniagencias de excursiones y nosotros hemos reservado con un guía privado, una para las Lagunas Altiplánicas y el Salar de Atacama.
Carolina, así es como se llama nuestra guía, sabe mucho de la zona, y no solo eso, sino que disfruta enseñándolo y contándolo a los demás. Primero hemos ido al Salar. Es impactante con sus colores, los zonas de sal, la tranquilidad...
El trayecto hasta llegar allí es increíble, ver el volcán Licancabur con su cima nevada te deja con la boca abierta.
Y de allí a las Lagunas Altiplánicas. ¡¡Qué colores, qué tranquilidad!!!
Para mañana hemos dejado el Salar de Tara y el Valle de la Luna, pero el resto de la tarde la pasamos paseando y tomando unas chelas (=cervezas), en el Chelabar, mientras ojeamos cuál será nuestro siguiente destino una vez que partamos de Atacama.
¡¡¡Cuánto me gusta viajar, improvisar, disfrutar de las cosas locales de cada país, de sus tradiciones, de su cultura!!!
Lo primero que hemos visto es el Salar de Pujsa. Si el de Atacama ya nos pareció increíble, teníais que ver este, bello no, bellísimo.
Y de aquí, a los Monjes de Pacana: enormes pilares de piedra, en mitad del desierto, que asemejan a gigantes monjes que cuidan del lugar.
Hemos seguido nuestro trayecto hacia el Salar de Tara donde abundan los flamencos, tanto Chilenos, como James.
Y seguimos el día con nuestra gran visita al Valle de la Luna, un paisaje lunar, característico por sus gigantes dunas, que por supuesto, no dejan impasible a nadie.
Y por su naturaleza de aspecto volcánica.
Nuestro tercer día en Atacama nos depara dos excursiones totalmente distintas: los Geysers del Tatio y la Laguna Cejar. Desde mi punto de vista, este tema de los geysers está sobrevalorado, o como dirían los anglo parlantes, para mí no es “overrated”. Madrugón, pasas un frío del carajo y luego no es para tanto.
Pero lo de la Laguna Cejar es una auténtica pasada. Tiene un color azulado difícil de describir y por su gran concentración de litio y sal, flotas. Sí, sí, flotas, no existe posibilidad de que te hundas. Una sensación bastante extraña pero muy divertida.
Y una vez salimos de allí, vamos a los Ojos del Salar, dos lagunas pequeñas, redondas y muy profundas, tipo pozos de agua dulce. Si eres un poco decidido te tirarás desde el borde, no da demasiada impresión y aparte de quitarte la sal del anterior baño, volverás a sentirte como un niño.
Y lo mejor para el final…la Laguna de Pastoreo. Sin nada de profundidad, donde se acumulan los bloques de sal. Allí esperamos a la puesta sol. NO WORDS!!!!
Y nuestros días en Atacama han finalizado. Mañana volamos a Santiago donde cogemos otro avión con destino a Tenuco, la tierra de los VOLCANES…pero para saber más, tendrás que esperar a la segunda parte.
… CONTINUARÁ
Fotos: SigueElRizo